En un fallo que ha generado intensos debates en la comunidad, el Tribunal Colegiado de Primera Instancia de San Cristóbal ha declarado culpable de homicidio excusable al agente policial Papilin González, en relación con la trágica muerte del estudiante de ingeniería Cristian Perier Corporán el pasado marzo en el sector Los Agrónomos de Villa Fundación.

Los jueces determinaron que la acción de González, que resultó en la muerte de Cristian Perier Corporán, fue un caso de homicidio involuntario. El incidente ocurrió mientras el joven estaba acompañado por su novia.

Como resultado de este veredicto, Papilin González ha sido condenado a dos años de prisión en la cárcel de Operaciones Especiales de la Policía Nacional en Manoguayuabo.

El expediente acusatorio detalla que los hechos tuvieron lugar cuando Papilin González, junto con el raso Joel de los Santos Peña, realizaba una patrulla en la zona del residencial José Francisco Peña Gómez de la provincia. Después de ordenar la detención y perseguir el vehículo, los agentes lograron alcanzarlo, momento en el que González Peña disparó al joven a través del cristal delantero.

El veredicto ha provocado reacciones mixtas en la comunidad, con algunos argumentando que el castigo es insuficiente, mientras que otros consideran que refleja una comprensión de las circunstancias atenuantes que rodearon este trágico incidente. El caso ha destacado la necesidad de un mayor escrutinio y reforma en el uso de la fuerza por parte de las fuerzas del orden en situaciones similares.