Este Sábado Santo, las playas Najayo y Palenque, así como el río Nizao, se convirtieron en destinos populares para los bañistas que buscaban disfrutar del asueto de Semana Santa en compañía de sus familias y amigos.
Desde tempranas horas de la mañana, un gran número de personas provenientes de la capital y otras provincias se trasladaron a estos balnearios, cargando neveritas con bebidas, bocinas y las típicas comidas playeras como moro, espaguetis y panes.
A pesar de la masiva presencia de visitantes, los comerciantes locales reportaron que las ventas no alcanzaron los niveles de años anteriores. Rodolfo Aquino, quien administra un negocio familiar en Palenque desde hace más de cuatro décadas, lamentó la baja afluencia de clientes, indicando que en años anteriores su local solía estar lleno desde muy temprano en la mañana.
Julio Arias, vendedor en la playa Najayo, compartió la preocupación de Aquino, señalando una disminución considerable en las ventas en comparación con años anteriores.
A pesar de estas preocupaciones, José Alberto Paulino, encargado del departamento de Operaciones de la Defensa Civil de Palenque, informó que la jornada se ha desarrollado con tranquilidad. Destacó que los bañistas han acatado las recomendaciones de seguridad establecidas por las autoridades, como el uso de botellas plásticas en lugar de envases de vidrio para bebidas alcohólicas.
En cuanto a la asistencia de personal de emergencia, Paulino aseguró que la Defensa Civil, los bomberos y la Cruz Roja están desplegados con un total de 75 miembros para brindar apoyo y garantizar la seguridad de los visitantes.
A pesar de las ventas moderadas, los bañistas continúan disfrutando de un día de esparcimiento en los hermosos paisajes naturales que ofrece la provincia de San Cristóbal durante esta temporada vacacional.
