Los juegos de mesa ayudan a fortalecer las relaciones que existen entre las familias, los amigos o las parejas, esto debido a que no requieren del uso de dispositivos electrónicos, fomentando así la interacción. Sin embargo, al ser una actividad en la que solo puede haber un ganador, algunos jugadores no aceptan su pérdida y pueden llegar a generar unos cuantos problemas. 

Tal y es el caso de John Armstrong, un hombre que perdió el control luego de haber perdido un juego de Monopoly y asesinó a su padrastro y hermanastra. El hecho tuvo lugar en Tulsa, Estados Unidos.  

El caos durante el juego fue muy fuerte, en vista de eso, la mujer a cargo de la casa donde estaban jugando los mandó a todos afuera para que resolvieran el conflicto. Pero, cuando salieron John Armstrong amenazó con un arma a los dos jugadores y los empezó a perseguir por toda la calle. 

En vista de esta situación, la mujer que estaba dentro de la casa marcó al 911, sin embargo, estos no llegaron a tiempo y las víctimas ya habían fallecido, pues John Armstrong no dudó ni un segundo en disparar contra los dos miembros de su familia y vengarse por haber perdido el juego.  

“No hay tarjetas gratis para salir de la cárcel en la vida, lo esposamos y lo llevamos a la cárcel”, dijo Bean, uno de los policías que capturó a John Armstrong.