Dos pilotos de la agencia Ethiopian Airlines, la aerolínea más grande del continente africano, han causado un insólito incidente esta semana. Ambos se quedaron dormidos durante su vuelo desde Jartum hasta Addis Abeba.

El avión que dirigían era un Boeing 737 que se encontraba a 37.000 pies (11.200 metros) en el momento en el que la aeronave debía comenzar el aterrizaje al aeropuerto internacional de la capital de Etiopía.

Cuando el piloto automático se desconectó, la alarma despertó a los pilotos, quienes de inmediato reaccionaron y realizaron las maniobras necesarias para retomar el rumbo hacia Addis Abeba, donde acabaron aterrizando unos 25 minutos después del hecho.

«La tripulación en cuestión ha sido retirada de las operaciones a la espera de una investigación más amplia. Se tomarán las medidas correctivas apropiadas en función del resultado de la investigación. La seguridad siempre ha sido y seguirá siendo nuestra principal prioridad», redactaron en un texto para la página web de la aerolínea.