De 17 puñaladas mató a su hija de tres años la identificada como Justin M. Johnson, de 23 años, según ella “porque Bob Esponja se lo ordenó”. Ahora le toca cumplir cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por de homicidio grave en primer grado y un cargo de abuso infantil en primer grado.

Sutton Marie Mosser, su hija, fue asesinada por su madre, solo dos días después de celebrar su tercer cumpleaños, informa Daily Star. Los fiscales dijeron que el hermano de Johnson encontró una bolsa de basura con el pie de un niño sobresaliendo en la casa de Johnson en Oscoda Township, Michigan y llamó a la policía.

Según reseña de Law & Crime, los oficiales que llegaron a la escena recuperaron el cuerpo de Sutton de la bolsa, pero la madre ya no estaba en la escena, sino que fue encontrada cuatro horas y media más tarde, donde fue detenida. Ella respondió diciendo que no quería hablar del tema y fue arrestada.

Johnson dijo que regresó a casa e intentó suicidarse antes de matar a su hija, supuestamente bajo la ilusión que Bob Esponja se lo había dicho.

“Me dijo que no recordaba los detalles de lo que sucedió en el momento de lo que le sucedió a Sutton, que estaba experimentando alucinaciones debido a la abstinencia de heroína y que no dormía durante aproximadamente dos semanas”, dijo Eberline en la corte, dice Daily Star.

«Estaba teniendo alucinaciones de la televisión que le habían dado instrucciones de quitarle la vida a su hija o la matarían».

Johnson admitió que había sufrido alucinaciones antes de la muerte de su hija y no recordaba que su madre dejara a Sutton a solas con ella ni ningún detalle sobre el espeluznante asesinato.

Ella afirmó que solo se enteró de la masacre después de que la policía le dijo lo que había sucedido y pasó los cuatro meses posteriores experimentando más alucinaciones antes de que los medicamentos para la salud mental comenzaran a funcionar, informa Daily Star.

«Quiero que todos sepan que estoy llena de remordimiento y deseo todos los días poder cambiar de lugar con mi hija», dijo.

Johnson también le dijo al tribunal que sufría una serie de problemas de salud mental para los que no había estado tomando medicamentos. También admitió haber usado sustancias ilegales antes del incidente.

Johnson se declaró culpable de un cargo de homicidio grave en primer grado y un cargo de abuso infantil en primer grado relacionado con la muerte de su hija, diciendo que estaba motivada para hacerlo porque quería «justicia» para su hija.

“Cualquier madre querría justicia. Yo también quiero justicia para Sutton”, dijo Johnson, indica Daily Star.