Cada 12 de mayo, el mundo conmemora el Día Internacional de la Enfermera, fecha instituida en honor al natalicio de Florence Nightingale, pionera de la enfermería moderna. En la República Dominicana, esta efeméride adquiere una resonancia especial, al reconocer a miles de profesionales que, día tras día, sostienen con vocación y sacrificio la estructura del sistema sanitario.

Las enfermeras y enfermeros dominicanos no solo ejecutan procedimientos clínicos con precisión, sino que también representan la primera y, en muchos casos, la única forma de atención humana para pacientes en situación de vulnerabilidad. Desde centros urbanos de alta complejidad hasta unidades básicas de salud en comunidades remotas, su presencia es símbolo de consuelo, profesionalismo y compromiso social.

El Ministerio de Salud Pública ha reiterado su reconocimiento a este personal esencial, señalando que el fortalecimiento del sistema de salud dominicano requiere garantizar condiciones laborales dignas, acceso a formación continua y respeto por el ejercicio ético de la profesión. Por su parte, asociaciones gremiales como el Colegio Dominicano de Profesionales de Enfermería (CODOPENF) han insistido en que esta fecha debe servir no solo para condecorar, sino para reflexionar sobre las deudas estructurales que aún persisten en el sector.