Cada 5 de abril se celebra el Día Nacional del Árbol, una efeméride instituida para promover la conciencia ciudadana sobre la vital importancia de los árboles en la sostenibilidad ambiental del país. La fecha, más allá de su carácter simbólico, representa un llamado urgente a detener la degradación de los ecosistemas forestales y a valorar su función esencial en la vida cotidiana: desde la purificación del aire hasta la conservación de suelos y la regulación del clima.

Esta conmemoración tiene sus raíces en la necesidad de crear una cultura de respeto y compromiso hacia la naturaleza, especialmente en un contexto de crecientes amenazas ambientales. En este sentido, el 5 de abril se convierte en una jornada para sembrar no solo árboles, sino también valores ecológicos, responsabilidad intergeneracional y amor por el entorno natural que sustenta la vida.