San Cristóbal, RD. - El acto de arruncharse, ese gesto de cercanía y afecto que implica abrazar y compartir calor corporal, ha demostrado ser mucho más que una simple muestra de cariño. Diversos estudios científicos confirman que este contacto físico tiene efectos positivos en la salud, especialmente en las mujeres, ayudándolas a reducir el estrés, mejorar su bienestar emocional y fortalecer su corazón.

Investigaciones han revelado que los abrazos y el contacto físico estimulan la liberación de oxitocina, la llamada "hormona del amor", la cual tiene un efecto relajante sobre el organismo. Esta sustancia no solo disminuye los niveles de cortisol, la hormona del estrés, sino que también contribuye a reducir la presión arterial, beneficiando así el sistema cardiovascular.

Aunque tanto hombres como mujeres pueden experimentar estos beneficios, los estudios sugieren que las mujeres reaccionan de manera más pronunciada a este tipo de contacto. Esto se debe a diferencias hormonales y a la forma en que su sistema nervioso responde al afecto físico. Además de favorecer la salud del corazón, los abrazos fortalecen los lazos emocionales, reducen la ansiedad y mejoran el estado de ánimo, convirtiéndose en una herramienta clave para el bienestar integral.

En un mundo cada vez más acelerado, donde el estrés y la ansiedad son comunes, practicar el arte del arrunche podría ser una estrategia natural y efectiva para mejorar la calidad de vida. Quizás, más que un lujo, el contacto físico debería considerarse una necesidad para la salud.