En los últimos años se ha dado a conocer la información de que los hombres que tienen un comportamiento más “cotizado” y se presentan como más difíciles, son los que tienen más éxito con las mujeres. Según una teoría, las mujeres se sienten atraídas por el desafío de conquistar a un hombre.  En un estudio realizado por el Instituto de Investigación de Psicología de la Universidad de Texas, se encontró que las mujeres se sentían más atraídas por los hombres que demostraron ser más difíciles de conquistar. 

En dicho estudio, los hombres que se “cotizaban” más fueron los que se volvieron atractivos para las mujeres que participan en la investigación. Esto significa que, cuando un hombre muestra comportamientos de dificultad, ya sea por negar la atención, apoyo o mostrando desinterés a una mujer, esto le da cierta sensación de poder y control al hombre. Esta sensación impresiona a las mujeres, porque la lógica dice que, si los hombres están siendo más difícil, entonces deben tener algo importante que ofrecer. 

Otra posible explicación de la popularidad de los hombres difíciles de conquistar es el término "negatividad intersexual". Esto significa que los hombres pueden proyectar una imagen de control social a los demás, lo que les permite tener la iniciativa y ser los tomadores de decisiones. Al mismo tiempo, les permite evitar el riesgo emocional con las mujeres. 

En conclusión, parece que los hombres deben aprender a aprovechar esta tendencia para un mayor éxito con las mujeres. Esto no quiere decir que los hombres deben ser necesariamente difíciles de acercarse, sino simplemente mostrar algo de reticencia al compromiso para comprobar que los hombres tienen algo qué ofrecer. Esto no sólo aumenta las posibilidades de que las mujeres se sientan atraídas por los hombres, sino que también ayuda a los hombres a afirmar su masculinidad y lograr el éxito.