Un empleado de tan solo 16 años, quien trabaja en un restaurante de comida rápida de Wendy’s en Lynn, Massachusetts, recibió el pasado martes un disparo en el hombro después de un altercado con un cliente que recibió una bebida del tamaño incorrecto.

La víctima de 16 años fue transportado a un hospital local con lesiones que, según los que médicos que lo atendieron, no ponen en peligro su vida. Asimismo, se informó, que otro empleado de 17 años fue rozado por una bala, pero este no necesitó asistencia médica.

Los videos que circulan en las redes sociales muestran vidrios rotos en la ventanilla del autoservicio y un agujero de bala en el otro lado.

Mientras continuaba la investigación, alrededor de una docena de policías llegaron al restaurante y lo cerraron durante varias horas, según Fox News. La entrada al restaurante estaba bloqueada por vehículos policiales.

La policía confirmó que una disputa en la ventanilla del autoservicio provocó el tiroteo.

Un amigo del adolescente, que optó por permanecer en el anonimato, dijo que el cliente disparó después de no recibir el pedido correcto. “Pidió uno grande, recibió uno pequeño, volvió y disparó”, dijo el amigo. También resaltó los peligros de tales acciones en un vecindario ocupado con niños que pasan con frecuencia.

Wendy’s emitió un comunicado condenando la «violencia sin sentido» y expresando su gratitud a los socorristas.

La compañía se comprometió a cooperar con las fuerzas del orden locales durante la investigación en curso y enfatizó que la seguridad de sus empleados y clientes es su principal prioridad.