Los dominicanos que residen en Jerusalén compartieron sus experiencias sobre el reciente episodio de ataques y alarmas antimisiles que sacudió la capital israelí. A pesar del pánico generado por el sonido de las alarmas, hasta el momento no se han reportado ciudadanos dominicanos secuestrados o heridos debido a la incursión de miembros de Hamas en territorios de Israel. A continuación, se narran las vivencias de uno de los residentes dominicanos en Jerusalén.

Un dominicano que reside en Jerusalén vivió momentos de tensión cuando las alarmas antimisiles comenzaron a sonar. En respuesta, siguiendo los protocolos de seguridad, se dirigió rápidamente a un supermercado cercano para abastecerse de alimentos esenciales para su familia. Sin embargo, al salir del supermercado, se encontró con que los ascensores habían sido suspendidos y los accesos al edificio estaban cerrados por precaución.

Ante esta situación, se vio obligado a subir 15 pisos a pie con las compras que había realizado, pensando en asegurar las necesidades alimenticias de su familia. Una vez dentro de su apartamento, se refugió en una habitación especialmente diseñada con paredes gruesas que sirven como bunker y que protegen contra posibles proyectiles.

Durante el episodio de ataques y alarmas, el dominicano se mantuvo en contacto con su madre para asegurarle que él y su familia estaban resguardados. Explicó que en Jerusalén, quienes residen en edificios con estas medidas de seguridad conocen los protocolos a seguir en caso de emergencia, incluso si alguien de la familia está fuera del edificio.

El testimonio del dominicano refleja cómo aquellos que viven en Jerusalén deben aprender y adaptarse a las reglas de seguridad, los sonidos de las alarmas y las medidas de protección en situaciones de conflicto.

Razones comunes de visita a Israel:

Los dominicanos suelen visitar Israel por motivos religiosos y educativos. La comunidad catecumenal dominicana organiza viajes anuales en los que participan alrededor de 300 miembros. Además, el Gobierno de Israel ofrece becas para cursos de corta duración a dominicanos a través del Programa de Cooperación Internacional para el Desarrollo (MASHAV).